En torno a Quintão, con vista hacia el río Homem, se extiende la vega de campos agrícolas bien cuidada, en donde se práctica una agricultura tradicional en régimen de policultivo, en paralelo con el pastoreo. Entre algunas parcelas agrícolas aparecen pequeños bosques de roble, líneas de agua y algunas zonas de matorrales que, en conjunto, forman un mosaico de hábitats rico en biodiversidad.