De calles estrechas y casas de granito, Campo do Gerês o São João do Campo es una aldea tradicional con fuerte cariz comunitario. A lo largo del tiempo la aldea vivió diferentes dinámicas sociales y económicas, pero sin nunca perder sus tradiciones y el significado de sus orígenes.

En los años 60 y 70 vio cómo se instalaron los barrios de la EDP y los astilleros para la construcción de la presa de Vilarinho da Furna, al mismo tiempo que la comunidad de la aldea de Vilarinho se mudaba para São João do Campo. Los nuevos barrios trajeron gente nueva y servicios que no existían. Los servicios forestales del Estado Novo (en español, Estado Nuevo o Nuevo Estado) también controlaban el uso de los terrenos baldios[1], dejando menos espacio para el ganado de la población. En esta época ocurre también la gran ola de emigración y la partida de muchos de los hombres de la tierra.

Pero la sierra de Gerês ya era conocida y visitada por muchos amantes de la montaña y la aldea de Campo do Gerês era uno de los principales “cuarteles” de acogida. El campismo salvaje y las caminatas en la sierra comenzaban a ser cada vez más una realidad por estas tierras. Y de poco a la tradicional aldea de montaña se transformó en una aldea abierta al turismo con diversos servicios disponibles, manteniendo siempre su genuinidad.

No deje de visitar la Porta[2] do Campo do Gerês, el Museo Etnográfico de Vilarinho da Furna, el Museo da Geira, la Mata de Albergaria y la vía romana.

[1] En Portugal y en Galicia un baldio es un terreno detenido y gestionado por una comunidad local. El concepto existe en otras regiones con nombre como bien comunal o procomún

[2] centro de recepción e información del PNPG